En Hepyc, han desarrollado y mejorado tanto la geometría como el nivel de acabado superficial para conseguir la menor fricción posible e incrementar el rendimiento, así como la calidad de las roscas producidas. Sus machos están especialmente diseñados a partir de las siguientes características particulares:
- Fabricados en aceros pulvimetalúrgicos de máxima calidad (HSSE-PM).
- Recubrimientos superficiales y tratamientos de pulido de última generación para conseguir la menor fricción posible.
- Diseño especial de caras y vértices del polígono para conseguir la menor fricción posible.
- Menores longitudes de rosca que en machos de corte para reducir el esfuerzo torsor.
- Ranuras de engrase para asegurar una correcta lubricación necesaria en roscados a partir de 1,5xD.
- Tolerancias recrecidas “X” para compensar desgastes e incrementar la vida útil de la herramienta.
Los machos de laminación, a diferencia de los de corte, conforman la rosca a partir de la deformación del material. En los últimos años, su uso ha crecido exponencialmente debido a las ventajas que aportan respecto al corte, unido a las nuevas posibilidades en cuanto a materiales y al esfuerzo de desarrollo y mejora por parte de los fabricantes de herramienta.
Las principales ventajas de los machos de laminación respecto a los de corte, se resumen en:
- No se producen virutas.
- Mismo macho para agujeros ciegos y pasantes.
- Posibilidad de roscar agujeros ciegos hasta 4xD.
- Mayor rendimiento y velocidad de corte.
- Mismo macho para una amplia gama de materiales siempre que tengan un alargamiento mínimo del 10-12% y una resistencia máxima de 1.200 N/mm2.
- Mayor resistencia al desgarre y a la fatiga de las roscas producidas.
Por el contrario, hay que tener en cuenta una serie de requerimientos:
- Mayor par de giro (100-200%) respecto a los machos de corte.
- Importancia del taladrado previo: mayor diámetro y precisión que en machos de corte.
- Necesidad de lubricación abundante y constante.
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